dijous, 20 de febrer del 2020

LOS OTROS CATALANES



Hacía tiempo que andaba detrás de este libro, y por fin llegó a mis manos. Y ha llegado a mí como parte del trabajo de documentación de la novela que estoy construyendo. «Los otros catalanes», de Paco Candel, es para muchos una referencia para entender cómo vivian los inmigrantes llegados a Catalunya, principalmente durante la década de los 60.
Reconozco que analizar esta obra casi sesenta años después no es demasiado justo para con el autor, pero sí creo que es bueno para el lector, en el necesario ejercicio de analizar si aquello que pronosticaba Candel ha acabado ajustándose a la realidad o no...
A su vez, también debo reconocer que me acerqué a este libro esperando encontrar una novela y me he encontrado con un ensayo, algo que creía también iba a ser interesante desde el punto de vista del trabajo de documentación.
Yo espera encontrar un libro que sobre todo reivindicara el papel y la dignidad de los inmigrantes, de esos «otros catalanes», defendiendo el derecho de éstos a serlo y sentirlo. Pensaba que, porque así me lo habían asegurado, en este libro iba a leer la voluntad de los que se saben catalanes y son discriminados por los que se sienten los únicos catalanes. En parte, de esto también habla Candel, pero desde luego no es donde pone el acento...

Dicho todo esto, entro a valorar...

Me imagino que Francesc Candel se quedaría sorprendido, o no, si supiera que un hijo de inmigrantes leoneses, uno de esos «otros catalanes», se escandalizaría e incluso ofendería con su lectura. Porque básicamente el autor lo que hace es precisamente lo contrario de lo que yo esperaba: señala a quien se siente catalán teniendo origen diferente y habla en castellano. Entiéndase señalar a criticar. Y es que más bien parece que sea el propio Candel quien no entienda en absoluto de qué va la integración y sea él el que acuñe el término «otro catalán» cuando en realidad ÉL quiere decir «no catalán».
Otro dato horrible que oporta sin ningún criterio razonable es el que afirma que en el año 2040, cifra muy lejana para él entonces y no tanto para nosotros, no quedará ni un solo catalán en Catalunya... Me «inquieta» pensar que después de mí, nacido y criado en Catalunya, si mi hijo, nacido y criado en Catalunya, tendrá un hijo finlandés...

Quién sabe, quizá mi futura novela se entienda como que habla de esos «otros catalanes» simplemente como Catalanes, nada más, pero nada menos. Ése es el objetivo.

diumenge, 23 de desembre del 2018

LA VIDA

Siempre recuerdo aquel otro blog. Escrito en otro lugar, que en realidad es éste. Desde otro corazón, que en realidad es éste. Reflejo de otra mirada, que en realidad es ésta.
Retales de una vida en continuo cambio. En evolución constante. Aprendizaje sin cesar. 
Nada es inamovible, nada es efímero, todo es eterno.
Y como recuerdo de aquel otro tiempo, que es éste también, y por pura necesidad, vengo a contarte algo de mi Vida. Algo que se sale de las fronteras ficticias que nos hemos inventado, que hemos acordado, aceptado y respetado hasta ahora. Voy a contarte algo que nada tiene que ver con el empeño de escribir. De llevar mis letras, mi mensaje, mi ilusión...
Pero ahora que pienso... Voy a hablarte exactamente de eso último: Ilusión.

La vida es una sucesión de capítulos encadenados sin guión. Todo puede cambiar. Todo debe mejorar. Todo va a ir bien. Genial. 
Cuando menos lo esperas, en el momento adecuado, algo hace «click» dentro de ti, y el color lo inunda todo. Aparece la persona destinada a cambiar el futuro. Esa extraña pieza que encaja. El motivo de una sonrisa que no cesa, la música que no calla, la estrella que no deja de brillar. Aparece y sabes, al momento, que es Ella. Que nos hemos elegido el uno al otro para unirnos para ser Uno. 

Nos estuvimos buscando mucho tiempo. Muchísimo, pero nunca demasiado. Nos estuvimos esperando cada noche. Nos deseamos todas las mañanas. Fuimos el deseo en cada estrella fugaz. Nos pedimos muchas veces a las estrellas pero nunca nos dimos por perdidos...

Hasta que nos encontramos por fin. En el momento justo. En la hora adecuada. En nuestro minuto de gloria. Para parar el tiempo. Para burlarnos del reloj. De lo impuesto. Del qué dirán. Del ¿por qué no?

Y así, siguiendo el instinto de nuestros corazones, como una hoja que se desliza suave siguiendo el curso de un rio tranquilo y limpio, hemos ido recorriendo en armonía etapas de una Vida en común. Trazando planes imaginarios sobre el papel de nuestras pieles. Definiendo, sobre todo, lo que queremos ser, lo que queremos conseguir, lo que ansiamos construir: una familia.

Los que me conocen pueden hacerse una idea aproximada sobre la importancia que tienen para mí estas palabras. Del peso, la transcendencia, la voluntad, la imaginación, el sueño, que encierran todos estos sentimientos sinceros.

Soñamos un millón de veces que llegaría este día. Este momento. Ahora. Sentir, los dos, que somos capaces de hacerlo. De alcanzarlo. De construirlo...

Y aquí estoy, de nuevo tecleando delante del ordenador vivencias personales. Anhelos. Sentimientos. Sueños. Hablándote de mí desde lo más profundo de mi ser. Abriéndome para decirte que sí, sí, sí y mil veces sí: la conocí. La hice mía entregándome a ella. Y entre los dos, ella y yo, nos hemos transformado en Dioses al ser capaces, fruto del amor, de Crear Vida.

Seremos madres. Seremos padres. Lo seremos todo junto a ti, nuestro querido y deseado hijo.

Todo lo demás, absolutamente todo, queda en segundo plano. 

La vida comienza ahora...

divendres, 28 de setembre del 2018

ESTRELLA FUGAZ


Los momentos son eso. Estrellas fugaces. Instantes efímeros. Cortos. Intensos. Llevo unos meses sintiendo fogonazos. Ideas que aparecen con la intensidad del deseo pero que acaban diluyéndose como una estrella fugaz en medio del firmamento. Como un azucarillo en el café. Como una gota de lluvia en el mar...
Ideas sobre mi próximo viaje. Mi próxima historia. Nuestra próxima novela. La de todos. 
Sí, lo sé. Lo anuncié desde el mismo momento en el que presentaba «El silencio de los justos». Incluso antes. Puede que lo recuerdes de habérmelo leído en mi página del Facebook antes de que mi segunda novela, ésa que anda de gira de un lado a otro, abandonara el incómodo lugar a oscuras en la que la postré durante meses... La 3.0 será mi pequeña obra maestra, me atrevía decir...
Pero ahora, una vez que veo el resultado de la segunda, ahora que me doy cuenta de su fuerza, de su peso, no puedo evitar dudar si publicar o no esa tercera. La que estaba destinada a ser la 3.0.
También es cierto que cada cosa ha de tener su tiempo específico. Su momento. Su ahora. Y «El silencio de los justos» absorbe todos mis pensamientos literarios. A ella me debo en cuerpo y alma para darle visibilidad. Presencia. Lo que venga, que algo vendrá, lo hará cuándo tenga que ser. Ni antes ni después, pues una Estrella Fugaz aparece sin que nadie la anuncie aunque se le espere... 
De momento, fijaremos la vista en el cielo para admirar las estrellas, sin olvidar la magia que corre bajo nuestros pies.


dimecres, 26 de setembre del 2018

EL VIAJE CONTINUA

La vida es un maravilloso viaje. Vivir es viajar. Nosotros, en el mejor de los casos, somos viajeros. A veces se nos olvida, perdemos de vista que estamos viajando, viviendo, y nos pasa de largo nuestra propia vida, ésa que nunca va a volver ni nadie más que nosotros podemos vivir...
Y dentro de ese Gran Viaje, existen otros muchos más. Cuando hablo de mi novela, y de todos los actos que voy haciendo al respecto, siempre utilizo el símil de «viajar». Porque así lo veo, así lo creo y así lo siento. Esta deliciosa aventura es un viaje, en el que todo el mundo tiene cabida. No tendría sentido viajar en solitario.
Recién he aterrizado de mis vacaciones. Ésas que me han llevado de nuevo a mi Bierzo querido. Unos días en los que cargar las pilas, como siempre, y también llevar mis letras lejos, muy lejos. A la lejanía de lo cercano. A nuevos viajantes que están dispuestos a viajar con los ojos bien abiertos. A personas decididas a volver a un ayer gris y mísero con la voluntad de hacer un hoy más transparente para llegar a un mañana limpio.
Reconfortado por la experiencia, seguimos. Con el convencimiento de hacer las cosas bien. Superando mis propias expectativas e incluso burlando mis miedos, que también los hay.
Todo esto es un viaje de larga distancia. Y continua. De momento, con una nueva parada en Barcelona, para dar una nueva oportunidad a los que no pudieron asistir a la primera presentación en el lejanísimo 14 de abril.
Pero ya miro más allá... A una nueva «gira» que hará volar mis letras por Asturias y Madrid... No nos avancemos, que el tiempo corre solo. Únicamente os diré que será a finales de octubre.
Sólo me queda dar las GRACIAS a todo el mundo que me ha acompañado en todas estas presentaciones por El Bierzo. En el «Teatro Villafranquino» de Villafranca, en la «Escuela del Ayer» de Fabero y en la «Casa del Libro» de Ponferrada. A los que me han escuchado en las radios «OndaBierzo» y «esRadio Bierzo», a los que me vieron en televisión dentro del programa Magazine de «La8 Bierzo», a los que leyeron los artículos sobre mis presentaciones en «Infobierzo». GRACIAS a todos por haber hecho posible que la primera edición de mi novela se ha haya agotado y «obligue» a mi editorial a producir una segunda.

Sigamos haciéndolo posible. Continuemos Rompiendo el Silencio.










dilluns, 14 de maig del 2018

VOSOTROS SOIS EL PREMIO

En muchos aspectos de esta vida, demasiados, la competición parece ser lo habitual. Todo aquello que se espera de nosotros. Ser mejor que el de al lado, y no mejor que uno mismo. 
La línea de meta, si es que verdaderamente existe, la cruzaremos todos y podremos levantar los brazos si es lo que queremos hacer. ¿Quién ha decidido que sólo puede hacerlo el primero? ¿Acaso hay primeros en esto de vivir?
Puede que para alguien todo sí sea una estúpida competición. Correr más, saltar más alto, hacerlo en menos tiempo, tener más likes, vender más libros...
Pero para nosotros, no. No existe competición y sí compartición. Vivir siempre es cosa, como mínimo, de dos. Y nosotros no nos conformamos con mínimos, claro que no.
Este pasado fin de semana, la vida me regaló momentos especiales con gente importante. Conversaciones a oscuras con mucha luz, de la interior que es la que más abriga. 
Sin mirar el reloj, lamentando el tiempo perdido por el medio sin un abrazo físico y relamiéndonos con los recuerdos de lo vivido con el convencimiento de que en cualquier momento, el día menos pensado, los volveremos a vivir. Hay momentos que no acaban nunca.
En otro tiempo, lejano, la bicicleta me obsequió con infinidad de amigos, recuerdos, vivencias. Cada actividad que emprendamos y compartamos, cada gesto, cada sueño, cada locura que hagamos, nos volverá a traer amigos, recuerdos y vivencias. Ése es el premio a todos nuestros grandes esfuerzos. Lo que anhelo. Lo que espero.
Conoceros. Escucharos. Reír junto a vosotros. Abrazaros. Entregaros mis sueños y miedos para que los soñéis y superéis conmigo. 
¿Se puede cuantificar una amistad? No, esto no es ninguna competición. 
Aunque debo reconocer que, de serlo, ganaría yo: vosotros sois mi premio.
Gracias a todos por estar siempre detrás de cada paso de página, hoy que se cumple justo un mes desde la presentación de «El silencio de los justos».

divendres, 11 de maig del 2018

AIRE

Reconozco que muchas veces, o tal vez sólo alguna, puedo llegar a ser un poco pesado, o tal vez mucho. En todo esto de mi novela, de creerme lo que me dicen que soy y me niego a reconocer, puedo llegar a serlo. Soy consciente de ello, aunque me cuesta mucho pisar el pedal de freno.
Hay tantas, tantísimas, cosas en la vida en las que nos es del todo imposible acelerar que por una en la que puedo hacerlo, en realidad no es sólo una, me niego a evitarlo.
Muchas veces me da por pensar en que si todas las personas que me conocen, por poca relación que tengan conmigo, supieran todo lo que significa para mí reunirnos para hablar de mi novela, no se perderían la oportunidad de sumarse al viaje que representa todo esto.
No es ego, ni vanidad, ni voluntad por hacerme ver. Los que me conocen de cerca, de veras, ya lo saben. Incluso me he visto obligado a superar mi timidez y vergüenza de que alguien me comente entusiasmado su lectura. Saber recibir una crítica negativa siempre resulta difícil, pero no lo son menos las positivas. Y es que también hay que saber lidiar con los alagos...
Después del parón tras la presentación, aderezada con numerosos actos más (entrevistas en radio, diarios y televisión), y siempre sazonada con el mejor ingrediente posible: tu presencia, ha llegado el momento de coger aire, fuerte, y renovar voluntades y decisiones. En el punto de mira, el corazón apunta ya decidido al mes de agosto, en el que volveré a viajar al Bierzo y donde espero hacer una puesta de largo emocionante de mis letras. La verdad es que me hace una ilusión enorme poder hacer algo allí. No en vano era uno de mis objetivos (ilusiones) una vez decidí tirar para adelante mi proyecto de publicar «El silencio de los justos». Y si nada lo impide, que nada lo ha de impedir, lo volveremos a hacer. Además, en dos lugares espectaculares. Muy por encima de mis espectativas. Muy acorde con mis sueños.
Pero antes de que eso suceda, nuevas citas, invitaciones, propuestas, en vivo o a través de nuevo de ondas radiofónicas, se me presentan. Sin forzarlas. Esperándolas. Sin pedirlas. Agradeciéndolas.
Sin dudar, en ningún momento, de que todo esto va de viajar. De soñar. De recordar. De sentir. De amistad, fuera y dentro de mi historia. De agradecimiento. De amor. De perdón. De libertad. De vivir. De renacer. De respirar. De volar. De creérselo. De compartirlo.
Porque el viaje, el de mi novela, el mío, el tuyo, el nuestro, el de todos, continua...




diumenge, 29 d’abril del 2018

Vinga va, peu a terra que ja és 29 d'abril!

Con esta frase cada mañana toma impulso a las ocho el programa de RAC1 de Jordi Basté, una vez ha comentado la actualidad en su sección «El davantal». Y me sirve a mí ahora a la perfección para expresar el momento en el que tomo aire una vez han pasado todos los actos programados desde la presentación, en aquel lejano ya 14 de abril, hasta hoy.
No he parado y me apetece hacerlo un poco, no demasiado tampoco, para hacer un balance ajustado de lo vivido. 
Balón a tierra, que dirían los futboleros, después de que el juego haya transcurrido demasiado tiempo por el aire...
En realidad, el pistoletazo de salida fue el día 13, justo un día antes de la presentación oficial, durante la entrevista en Ràdio La Mina. De nuevo charlando de literatura en las ondas. Una charla amena y relajada. Un placer y un privilegio poder repetir la experiencia de hacer llegar mis palabras lejos. Muy lejos. 
Además, ese mismo día tuve la oportunidad de hablar también en otra emisora. Emulando a mi propia novela, que como te he dicho hasta la saciedad pivota entre Barcelona y El Bierzo, intervine en la cadena esRadio Bierzo, con lo cual también volé hasta allí y mis palabras viajaron a la velocidad imposible de un pasar de páginas. 
Y llegó, por fin, el día esperado. 14 de abril. Presentación de «El silencio de los justos». En mi ciudad. El escenario no podía haber sido mejor. El Centre Cultural Tecla Sala es un lugar espectacular. La atención recibida antes, durante y después por parte de las Biblioteques de L'Hospitalet, mi ciudad, me dejaron perplejo. La ayuda y atención recibidas me hacen estar en deuda para siempre. Además, el acto fue un éxito. A pesar de las bajas, la asistencia fue muy numerosa y superó con creces a la de la presentación de mi primera novela. 
Pero es que antes, como maravilloso anticipo, el diario digital con más repercusión en El Bierzo, Infobierzo, publicaba un artículo sobre mi novela que me emocionó enormemente...

Ya estaba todo en marcha. Mis pequeños empezaron su viaje particular a nuevos horizontes. A paraísos imposibles. A cielos azules. A tormentas que no mojan. A nuevas vivencias. A nuevos escenarios. A nuevos retos. A países lejanos. A mares cristalinos. A ríos maravillosos. A bosques frondosos. A hogares en paz. A hospitales repletos de esperanza. A salas de espera con paciencia. A sueños por vivir. A pesadillas por superar. A silencios interrumpidos por la sonrisa de una niña. A ti. Y a hacia ti también...

Y llegó, con la calma y la seguridad de quien sabe que es esperado con ilusión, la Diada de Sant Jordi. Invitado por las Biblioteques de L'Hospitalet, tuve el privilegio de vivir desde dentro, como afortunado protagonista, un día tan sumamente especial. Poder firmar libros, charlar con amigos y lectores, conocidos y no conocidos, me deja una fotografía en la retina que no se podrá borrar jamás, bien archivada en el disco duro de mi corazón. Pero por si acaso, en otro momento indescriptible de poder vivir, la Televisió de L'Hospitalet recogió el momento a modo de reportaje sobre Sant Jordi en L'Hospitalet.
Finalmente, para cerrar este espectacular ciclo de promoción de mi novela, la guinda final. Entrevista en el programa cultural Taquilla Inversa de la Televisió de L'Hospitalet. Una oportunidad para seguir viviendo nuevas experiencias, superando metas y sintiendo que todo es por algo. Que todo merece la pena y que el objetivo de llegar a cuanta más gente mejor, se va cumpliendo.

Pie a tierra. Calma. Dejadme unos días de sosiego. Para respirar bien hondo. Permitidme que me sienta satisfecho por todo el trabajo. Por todo lo vivido y, sobre todo, lo sentido. Me gusta pensar que esto es un proyecto colectivo, de todos nosotros, y que vamos sumando voluntarios. Quien me sigue, quien me lee, quien me recomienda, quien sonríe conmigo, quien me escucha por la radio, quien me ve en la televisión, quien esboza una sonrisa de satisfacción mientras piensa: lo conseguimos, lo hicimos posible...
Cierro los ojos y me propongo mantener los pies en el suelo, mientras tú, siempre tú, me recuerdas en un susurro que tengo alas. Volemos.

Prometo seguir gritando en silencio. La agenda se mantiene viva.

#loestamoshaciendoposible